11 de mayo de 2014

El Coltan

Análisis de Caso:

El caso del Congo: “Celular sin sangre










Este caso tiene su punto, en el centro de África, en la República del Congo, por su parte el país se encuentra en un contexto de constante conflictividad, caracterizado por una continua guerra entre civiles, en el ámbito político se halla en permanente inestabilidad, en el aspecto geográfico el Congo está dividido en dos partes, en el lado oeste, es ocupado por los grupos rebeldes y en el extremo este está controlado por el Estado.
En este sentido una de las causas principales de los conflictos, suceden en torno al accesos y el manejo de los recursos que posee el Congo: cobre, oro, cobalto, ucranio y coltan, este último es el más importante y controversial,  y poco conocido, además  el 80% se encuentra en esta parte de África, el coltan se trata de un mineral imprescindible para la industria de aparatos eléctricos, las centrales atómicas y los teléfonos móviles GPS, satélites artificiales, armas teledirigidas, equipamientos médicos no invasivos, televisores de plasma, videojuegos, computadoras portátiles, PDAs, reproductores MP3 y MP4 ; un “oro gris” que podría traer prosperidad a los congoleños. Sin embargo, guerrillas locales y empresas multinacionales han comenzado a disputarse su explotación sin importarles el coste humano; por lo que este elemento se ha trasformado en un recurso estratégico,  a modo descriptivo dicho elemento es de color azul metálico, “coltan” es una palabra formada por la abreviatura de columbita-tantalita, un valiosísimo mineral del que se extrae el tantalio, un componente que presenta una gran resistencia al calor así como extraordinarias propiedades eléctricas. La columbita y, sobre todo, el tantalio están considerados metales altamente estratégicos. Por ello se entiende que exista en el Congo una guerra desde 1998, que sus vecinos, Ruanda y Uganda, ocuparan militarmente parte del territorio congoleño y que hayan muerto millones de personas. No hace falta tener muchos conocimientos de derecho internacional para afirmar que esta guerra constituye la mayor injusticia, a escala planetaria, que se está cometiendo contra un Estado soberano.
Según las naciones unidas, el ejército Patriótico Ruandés ha montado una estructura para supervisar la actividad minera en Congo y facilitar los contactos con los empresarios y clientes occidentales. Traslada en camiones el mineral a Ruanda donde es tratado antes de ser exportado. Los últimos destinatarios son Estados Unidos, Alemania, Holanda, Bélgica y Kazajistán. La Sociedad Minera de los Grandes Lagos tiene el monopolio en el sector y financia al movimiento rebelde Reagrupación Congoleña para la Democracia, que cuenta con unos 40.000 soldados, apoyados por Ruanda.
En este contexto, en relación al conflicto el principal país implicado es Bélgica, nación que por muchos años ha establecido un dominio colonial en el Congo. La ONU realizo un informe, donde se estableció un vínculo existente entre la guerra civil y el saqueo de los recursos con activa complicidad de las trasnacionales. A partir de ese informe unas ONGs belgas lanzaron un campaña denomina “celular sin sangre”, campaña algo controversial dados por los puntos obscuros que obstaculizaron el avance de la denuncia, pese a que desde los organismos institucionales, como el Ministerio de Economía conformado por políticos y empresarios se direccionaron algunas medidas de investigación, con la finalidad de advertir y corregir las prácticas de explotación de recursos. Los innumerables informes que iban saliendo a la luz, y que acusaban a Ruanda y Uganda del expolio de las riquezas minerales del Congo, permitieron una cierta presión internacional y el establecimiento de listas negras de empresas que operaban en la zona. Así, 34 empresas fueran acusadas de importar coltan o casiterita, y se consiguió que la compañía aérea belga Sabena suspendiese el transporte del mineral que realizaban desde Ruanda a Bruselas.
No obstante los argumentos planteados en el senado fueron débiles y sancionaron en favor de una de las empresas vinculadas, como el Grupo Forrest, esta empresa, tiene la historia más larga en cuanto a la explotación del Congo, al obtener su primera concesión de minería antes de que el Congo RDC declarase su independencia de Bélgica. El grupo Forrest, que incluye el grupo con sede en Ohio, OM, tiene numerosas concesiones en Kananga. El presidente, George Forrest es el antiguo director de la Compañía minera perteneciente al Estado de Congo, GEOCAMINES, y propietario de la compañía fabricante de armas New Lachaussee. Su imperio además incluye fábricas de armas y de municiones en Kenia y Tanzania. Por otra parte, otras rutas alternativas continúan funcionando y un considerable porcentaje del coltan congoleño sigue saliendo al mercado camuflado como procedente de Brasil o Tailandia.

Los efectos ambientales que genera la explotación del coltan:

La explotación de este mineral, el cual permite que hoy en día nos contemos con computadores, ipod y celulares entre otros aparatos tecnológicos, se realiza a cielo abierto y muchos de sus yacimientos en la República Democrática del Congo se han encontrado zonas con un gran impacto ambiental, provocando con su explotación grandes daños (desaparición de montañas, contaminación de ríos y pérdida de biodiversidad).Las empresas explotadoras de dicho mineral, no realizan actividades de recuperación del medio ambiente.
Otras preocupaciones derivadas de la extracción del coltan pasan, por la explotación laboral de los trabajadores, que trabajan en condiciones de semi-esclavitud y la destrucción de ecosistemas, pues los principales yacimientos coinciden con el hábitat de gorilas en peligro de extinción. Haciendo referencia a cuánto gana en promedio un trabajador congoleño, y que suena paradójico, es de $10 semanales, mientras que un minero gana hasta $40 extrayendo un máximo de un kilo. La tonelada de este preciado mineral cotiza en $400.000.
Además del coltan, aparecen otros minerales radioactivos como el uranio, torio y radio entre otros, los cuales producen un alto índice de enfermedades derivados de la radioactividad a la que son expuestos trabajadores, quiénes no poseen las condiciones necesarias de seguridad y salubridad, además una vez que estos elementos son desechados, sus residuos son altamente contaminantes.
Para ejemplificar la principales empresas que provocan estas problemáticas son las de telefonía móvil tal es el caso de TRAXIS exportan coltan al mundo entero y especialmente a China, donde se produce la mitad de teléfonos móviles que circulan anualmente por el planeta. Las grandes marcas internacionales (Motorola, Nokia...) subcontratan allí una parte de su producción, a sabiendas que el mineral viene de África.
Ante esta situación, las empresas de telefonía móvil han multiplicado sus campañas de comunicación, donde exigen a sus proveedores que no compren coltan en el Congo. El propio presidente de Nokia, preguntado a este respecto, respondió que siempre han sido cuidadosos con el medio ambiente.
Para ir cerrando, la conflictividad  que presenta el Congo en relación las problemáticas socioespaciales, culturales y ambientales son consecuencia de las externalidades ocasionadas por las grandes trasnacionales que utilizan este mineral y que por lo general no lo vemos.
A modo de reflexión, mientras llamamos por teléfono o disfrutamos la comodidad de lo electrónico, muchos ya están muriendo y seguimos nosotros contribuyendo a la destrucción de su medio ambiente, es decir en cierta medida somos responsables indirectos de las problemáticas que suceden en el Congo, sin embargo de esto nada se conoce ya que los grandes medios se sustentan de las publicidades de las empresas electrónicas, además que utilizan el soporte  tecnológico, que estas le proveen.


Fuentes consultadas:
Congo: el negocio maldito del Coltan -  http://bit.ly/RqZHyk
EL saqueo en el Congo - http://bit.ly/SDVdVP
Explotación del Coltán 10A, artículo del 7 de abril de 2011 - http://bit.ly/1isamTv


No hay comentarios:

Publicar un comentario